«¡No es Venezuela, es la Argentina!», dicen los vecinos correntinos que invadieron los alrededores de una planta de distribución de garrafas de gas.
El nuevo año comenzó con una fuerte suba de precio de la garrafa de gas que ronda un incremento, en algunos casos, del 120%. Es que a partir de esta semana y con la llegada del 2024, el tubo de 10 kilos ahora vale entre $8.000 y $9.000, valor que se incrementa aún más si es a domicilio.
Esta desregulación de costos y la eliminación de subsidios en el sector del gas en garrafa generaron una marcada disparidad en los precios para los consumidores en la provincia de Corrientes.
La liberación de precios hizo que las empresas vendan el producto sin una referencia establecida.
Desde horas tempranas de este jueves, una gran cantidad de capitalinos se agolparon en la planta de Amarilla Gas ubicada en Ruta 12, debido a que todavía comercializan a bajo precio.
A nivel nacional la garrafa de gas subio entre un 120 y un 150 por ciento. Por lo tanto, se formaron filas en las empresas distribuidoras para comprar la garrafa con anticipación al aumento.
Esto se sumó a la petrolera estatal YPF que incrementó, del resto de las firmas del sector, el 26% promedio los precios de las naftas y el gasoil en todo el país.