Por medio de un decreto, el presidente Javier Milei implementó la total desregulación del transporte interjurisdiccional de pasajeros. Esta nueva normativa permitirá a las empresas de transporte elegir libremente sus horarios, rutas, precios, tamaño de sus vehículos y paradas, sin la necesidad de autorizaciones ni trámites engorrosos.
La medida busca simplificar y dinamizar el sector, promoviendo una mayor competitividad y eficiencia en los servicios de transporte de pasajeros a nivel nacional.
Sin embargo, en Salta, la situación será diferente. Marcelo Ferraris, presidente de la Autoridad Metropolitana de Transporte (AMT), confirmó que esta medida no se aplicará en la provincia debido a la jurisdicción municipal sobre los servicios de transporte. Ferraris explicó: «La competencia del decreto del ejecutivo nacional es respecto a las cuestiones territoriales nacionales, es decir, el aeropuerto. Para Salta, la competencia es municipal y AMT es quien controla, por lo que el decreto, fuera del aeropuerto, no tiene validez».
La desregulación propuesta por el presidente Milei generó diversas reacciones. Algunos sectores aplauden la iniciativa, argumentando que reducirá costos y mejorará la calidad del servicio al fomentar la competencia. Por otro lado, existen preocupaciones sobre la posibilidad de que la falta de regulación conduzca a una disminución en la seguridad y la calidad del servicio, especialmente en áreas menos rentables donde las empresas podrían reducir frecuencias o incluso dejar de operar.
En Salta, la decisión de mantener el control local sobre el transporte interjurisdiccional apunta a preservar la calidad y seguridad de los servicios ofrecidos a los ciudadanos. La AMT continuará supervisando y regulando las operaciones para asegurar que se mantengan los estándares establecidos.